En Europa tan solo se recicla el 34,5% de todos los residuos de resinas y plásticos termoestables generados durante 2022, según la Asociación Europea de Industrias Plásticas (Plastics Europe). Esta cifra es preocupante, teniendo en cuenta los graves efectos para el medio ambiente derivados de la acumulación de este material altamente contaminante.

Esta situación ha impulsado a las industrias a explorar y desarrollar alternativas para el manejo adecuado de sus residuos de resinas y plásticos termoestables. El objetivo es minimizar la huella ambiental, especialmente considerando la relevancia de estos materiales en diversos sectores económicos.

En este artículo exploramos las mejores alternativas para el tratamiento de resinas y plásticos termoestables. Detallamos sus ventajas y evaluamos el impacto que tienen en la protección del medio ambiente.

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Las resinas son materiales que, una vez curados, no pueden volver a fundirse. Se utilizan en diversas áreas o industrias, incluyendo la construcción, la electrónica, la automoción y el embalaje.

Los plásticos termoestables, similares a las resinas en su incapacidad para fundirse nuevamente tras el curado, se emplean en aplicaciones parecidas. Sin embargo, se destacan especialmente en usos que requieren alta resistencia, como en piezas de maquinaria o moldes. 

Uno de los grandes desafíos que enfrentan las industrias en relación con estos materiales es su gestión de residuos. Dada la dificultad para reciclarlos, estos plásticos a menudo terminan en vertederos o incineradores, representando un problema ambiental creciente.

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Tratamiento de residuos de resinas y plásticos termoestables

Una alternativa efectiva para el tratamiento de residuos de resinas y plásticos termoestables en las industrias es la molienda. Este proceso convierte los residuos en material granulado, apto para la fabricación de nuevos productos, y consta de tres etapas:

Trituración

En esta fase, los residuos plásticos se trituran en trozos más pequeños, aproximadamente de unos pocos milímetros.

Secado

Tras la trituración, los residuos se secan para eliminar cualquier humedad residual. Este paso es crucial para garantizar la eficiencia del proceso de molienda y la calidad del producto final.

Molienda

Finalmente, los residuos de resina y plásticos termoestables se molturan hasta obtener un granulado fino, con un tamaño de unas pocas micras. Este proceso requiere maquinaria especializada capaz de moler y micronizar los materiales plásticos en grano y polvo.

En este contexto, CIMMA se destaca como una empresa innovadora y con amplia experiencia en el procesamiento de materiales plásticos y resinas. Su capacidad para satisfacer las necesidades de diversas industrias, como cereales, cerámica, química, biomasa y plásticos, así como en combustibles sólidos, la convierte en un referente en el campo del tratamiento de residuos.

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¿Qué sucede después de la molienda?

Una vez completado el proceso de molienda, el granulado obtenido puede tener múltiples aplicaciones en la fabricación de nuevos productos. Estos incluyen:

• Materiales de construcción: Como hormigón, mortero y aislantes, donde el granulado actúa como un agregado o refuerzo.
• Embalaje: Utilizado para fabricar cajas, bandejas y otros tipos de contenedores, el granulado ofrece una alternativa sostenible y resistente.
• Componentes de maquinaria: En la creación de engranajes, rodamientos y otras partes, el granulado aporta durabilidad y resistencia.

La molienda de resinas y plásticos termoestables se está consolidando como una de las tecnologías de reciclaje más prometedoras en Europa. Según estimaciones de Plastics Europe, se espera que para el año 2025, la producción de material reciclado derivado de este proceso alcance aproximadamente las 2,5 millones de toneladas. Este crecimiento subraya la importancia y el potencial de la molienda como una solución sostenible para el manejo de residuos plásticos.

Ventajas de la molienda de resinas y plásticos termoestables

El tratamiento de residuos de resinas y plásticos termoestables mediante la molienda presenta tres ventajas principales:

• Reducción de residuos: Este proceso disminuye significativamente la cantidad de residuos plásticos que terminan en vertederos o incineradores. Al reutilizar estos materiales, se reduce su impacto ambiental y se les otorga una segunda vida.
• Conservación de recursos naturales: La molienda ahorra recursos como el petróleo y el gas natural, que son esenciales pero contaminantes y costosos. Al reciclar plásticos, las industrias disminuyen su dependencia de estos recursos no renovables.
• Reducción de emisiones de gases de efecto invernadero: Este método contribuye a disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero, alineándose con normativas ambientales e iniciativas globales para el cuidado del medio ambiente.

Con más de 77 años de experiencia, CIMMA se ha especializado en diseñar y desarrollar soluciones de molienda que no solo satisfacen las necesidades específicas de las industrias, sino que también buscan mejorar la eficiencia en los procesos de micronización de sólidos. La compañía cuenta con una sala de pruebas donde simula condiciones reales para evaluar muestras de materiales de sus clientes. Este enfoque garantiza que los resultados y la calidad se alineen con los objetivos comerciales y ha sido el lugar de origen de nuevas tecnologías que han permitido a los clientes de CIMMA optimizar sus líneas de producción.

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¿Por qué la molienda es la solución?

La molienda de residuos de resinas y plásticos termoestables representa una tecnología emergente con gran potencial para mitigar la problemática de los residuos plásticos en el medio ambiente. Estos residuos, que pueden tardar cientos de años en descomponerse, ejercen un impacto significativamente negativo en los ecosistemas. La molienda permite reutilizar estos materiales para fabricar nuevos productos, disminuyendo así la necesidad de recurrir a recursos vírgenes.

Más allá de los beneficios ambientales, la molienda de estos residuos ofrece también ventajas económicas para las industrias. Por un lado, puede reducir los costes de producción y, por otro, facilita el cumplimiento de normativas medioambientales cada vez más estrictas.

En un contexto donde la concienciación sobre la sostenibilidad ambiental va en aumento, la molienda de residuos plásticos se perfila como una solución cada vez más necesaria y relevante para el núcleo de negocio de las industrias.

Envisolid, representante de marcas industriales como CIMMA, desempeña un papel crucial en el diseño y desarrollo de maquinaria de molienda. Nuestro objetivo es cubrir estas necesidades, promoviendo al mismo tiempo el cuidado del medio ambiente.